
Análisis Político
1.- El espacio de la oposición al oficialismo nacional, luego del cimbronazo causado por el proyecto del kirchnerismo de adelantar las elecciones, se focaliza en tres cuestiones: En primer lugar apoyar el reclamo del sector agrario y capitalizar en votos la afinidad con el electorado enfrentado al kirchnerismo a causa de su política para con el ruralismo. En segundo término, dificultar todo lo posible el tránsito del proyecto de adelantamiento de elecciones en el Congreso. Finalmente, prepararse para la contienda electoral del 28 de junio limando asperezas hacia dentro de cada fuerza.
2.- De los tres campos de acción donde la oposición se enfoca por estos días, el tercero parece ser el más difícil de afrontar. La tarea respecto al reclamo agrario será similar a la del año pasado y consistirá en apoyo mediático, asistencia a actos rurales y recepción en el Congreso de proyectos de interés para la Mesa de Enlace. El segundo grupo de cuestiones no es ni más ni menos que lo que ha hecho durante todo el mandato de los Kirchner, es decir actuar a través de los representantes del Congreso buscando provocar fisuras hacia el interior de la fuerza oficial a través de temas como la seguridad o el INDEC. El tercer camino parece el más escarpado por las razones indicadas en el siguiente párrafo.
3.- A pesar de que la oposición espera triunfar en distritos importantes como Córdoba, Mendoza, Capital Federal y, tal vez, Santa Fe; el problema es que sumarán en cada uno de esos lugares para distintas canastas, alimentando las chances de un triunfo kirchnerista. En Provincia de Buenos Aires se entablará una dura batalla entre Stolbizer y De Narváez/Solá, en Córdoba no parece aún fortalecerse un acercamiento entre la UCR y Luis Juez, en Capital Federal el PRO y la Coalición Cívica se dividirán la mayor parte de los votos.
4.- El otro problema que tiene la oposición es que, lejos de ser un espacio bifronte, caracterizado por una tendencia centroderechista y una centroizquierdista, se manifiesta más proclive al liderazgo personalizado que a la conducción colectiva. En tiempos en que la política se ha personificado y en que el voto se define más por el atractivo o rechazo al candidato más que al Partido que lo postula, esta característica no representa tanto un problema por lo que en sí misma es, sino por lo que revela: Una dificultad para estructurar una maquinaria política de proporciones nacionales que sustente la presencia mediática. El armado subterráneo de esquemas para la fiscalización de votos, la propaganda boca en boca, la organización de actos masivos y demás actividades de militancia es un imposible todavía para la oposición en una escala nacional.
5.- Más allá de estos nubarrones, la oposición tiene un escenario favorable en algunos aspectos. El desgaste del kirchnerismo en percepción de la opinión pública, en lealtad de sectores políticos y en recursos económicos, ha sido importante durante el último año y podría serlo en el 2009 también. Para un gobierno acostumbrado a disciplinar voluntades políticas mediante la transferencia de recursos fiscales, el malestar económico es un dato no menor.
6.- Ante una eventual diáspora kirchnerista la pregunta es qué sector de la oposición se verá más beneficiado, si el PJ disidente o el polo Socialismo-UCR-Coalición Cívica. Este último tiene como posibles candidatos a Presidente en 2011 a Carrió, Binner y Cobos. El Justicialismo a Macri, Solá y Reutemann. El kirchnerismo, ante las dificultades se ha manifestado proclive a encerrarse en la vieja estructura peronista. Si pierde las próximas elecciones, es más probable entonces que luche hacia dentro del PJ por cargos en un Gobierno postkirchnerista justicialista que cobije a algunos de los hoy funcionarios, antes que apoyar a una coalición de centroizquierda, radical y antiperonista.